Ese oasis que significa el descanso de las vacaciones de invierno en el medio de un año cargado de trabajo y responsabilidades puede volverse un foco de problemas si no se toman las decisiones financieras correctas que dependen en gran medida de la información y la planificación que podamos realizar con anterioridad a la fecha de partida.
Aquellos que tengan la suerte de viajar al exterior del país, se encontrarán (como sucede desde octubre del 2011) con problemas para hacerse de las divisas necesarias para afrontar los gastos en el destino elegido. Deberán entonces tener en cuenta algunas limitaciones existentes a la hora de usar las tarjetas de crédito o débito, medio de pago utilizado por los argentinos que viajan fuera del país para aprovechar el tipo de cambio oficial con el que se computan los consumos.
Quienes hayan optado por el descanso en alguna de las tantas provincias hermosas de nuestro país, tendrán que administrar bien su dinero para no caer en el consumismo desmedido potenciado por el actual modelo económico y la sensación de "desprendimiento" habitual en períodos vacacionales, con el fin de no pasar luego el segundo semestre del año trabajando para pagar lo gastado durante el descanso. A continuación veremos algunos consejos sencillos y prácticos al respecto.
Vacaciones en el interior: separar entre gastos primarios y secundarios
El ahorro puede darse en varios frentes de manera simultánea.
Un esquema muy útil es subdividir los gastos totales en gastos primarios y gastos secundarios.
Los gastos primarios son aquellos derivados del pasaje, estadía, traslado y excursiones.
La opción más popular (pero también, más costosa) es la de comprar directamente un "paquete armado".
Pero también existe otra posibilidad mucho más económica: el "hágalo usted mismo", que tiene además la ventaja de poder manejar los tiempos y vincularse más con la gente del lugar.
Internet es un canal ágil y gratuito para averiguar cualquier precio, desde la habitación de un hotel 3 estrellas en Salta hasta el alquiler de un auto en Mendoza.
Contactarte con las entidades municipales de turismo del lugar que elijas para vacacionar también puede ser una buena idea, ya que allí te podrán informar sobre actividades y excursiones, pases con descuentos para numerosos lugares de atractivo turístico y te guiarán en todo lo que necesites para una mejor estadía
El ahorro generado por tomarse el tiempo de averiguar precios y eventualmente contratar servicios directamente en el lugar de destino, puede cubrir varios días de gastos secundarios (viáticos, comidas, salidas, regalos).
Luego, para optimizar estos últimos, es recomendable calcular cuánto dinero hay disponible para gastar durante el viaje y luego dividirlo en partes iguales, una por cada día de vacaciones.
Viajes al exterior: lo que tenés que saber de las tarjetas de crédito/débito
Para el Gobierno, los gastos que los argentinos realizan en el exterior representan una fuga de divisas, y por ello es que se han aplicado limitaciones e impuestos que fueron cambiando (leáse endureciéndose) a lo largo del tiempo, sumiendo a la gente en un estado de confusión con respecto al uso de los plásticos en el extranjero.
Tarjeta de débito:
En primer lugar, es importante aclarar que no existen al día de hoy mayores restricciones para gastos en el exterior con tarjeta de débito que las que aplica el propio banco emisor del plástico a sus clientes basándose en saldo disponible o límite de gasto diario. Todo gasto realizado se pasará a la cotización oficial de la moneda que rige en el lugar donde se efectuó el mismo más un 20% de impuesto establecido por la AFIP.
¿Cómo se puede saber cuál es el tipo de cambio que se terminará aplicando para los gastos? La mejor manera es realizar un gasto pequeño al llegar al país elegido para las vacaciones y ver luego de manera online cuál fue el cambio de referencia utilizado al día siguiente (por más que el dinero se debita en el momento, suele aparecer recién a las 24hs en el resumen online).
Con respecto a las extracciones de divisas con tarjeta de débito, las mismas solo son factibles si se tiene una cuenta corriente en dólares asociada a la misma.
Caso contrario, el plástico solo servirá para realizar consumos pero no para hacerse de dinero físico.
Tarjetas de crédito:
Tampoco existen mayores restricciones para la compra con tarjetas de crédito que las que se aplican en la Argentina, referente a límites de gastos mensuales de los usuarios.
Al igual que con el débito, los gastos se computan a tipo de cambio oficial (la diferencia es que hayan sido realizadas en la moneda que sea siempre se pasan a dólares) más un 20% de impuesto, que luego puede ser recuperado dependiendo de la situación fiscal de cada uno (por ejemplo, para los responsables inscriptos es más fácil que para los monotributistas).
Con tarjetas de crédito sí es posible retirar dinero en dólares o en la moneda de curso del país visitado, pero hay que tener en cuenta dos aspectos importantes:
- Es necesario haber gestionado un PIN antes del viaje con el emisor de la tarjeta. Esto se realiza con un simple llamado telefónico y puede incluso gestionarse desde el exterior, pero siempre es mejor hacerlo antes para evitar contratiempos
- El Gobierno ha establecido un límite de 50 dólares (o su equivalente) para países limítrofes y 800 dólares para países no limítrofes
Esto no quiere decir que gestionando el PIN un viajante se asegura poder retirar 800 dólares si se encuentra vacacionando en un país no limítrofe porque el monto también dependerá de los limites que los emisores del plástico le apliquen a sus clientes (el más común es del 10% del promedio del límite general de compra que tiene el cliente con su tarjeta). Esto también puede averiguarse antes de viajar con un llamado telefónico.
Es importante tener en cuenta los gastos que el retiro produce: a los 5 dólares aproximados que cobran las tarjetas hay que sumarle el costo que aplique el cajero del exterior.
Conclusión
Como se ve, viajar tranquilo y lograr desconectarse tiene que ver con poner en orden primero los aspectos financieros del viaje.
Tener presente los gastos primarios y secundarios, no endeudarse para viajar, gastar solo lo que se tiene y realizar algunas averiguaciones en el banco con un simple llamado para quienes viajan al exterior y piensan usar sus tarjetas de crédito/débito puede significar la diferencia entre las vacaciones soñadas y un viaje lleno de problemas y contratiempos..
Nicolás Litvinoff / Estudinero
Publicado en el Diario La Nación (Argentina)
Publicado en el Diario La Nación (Argentina)